Una experiencia culinaria en L’ours Maçon, Auvernia
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París, 19 de agosto de 2025. Querida Ofelia, En el corazón de la región de Auvernia, donde los bosques despliegan tonos verdes y las colinas ondulan suavemente bajo cielos que parecen pintados, se encuentra un rincón singular que encarna la esencia de la vida rural francesa: el restaurante L’ours Maçon. Alejado del bullicio de las ciudades y abrazado por un bello bosque, este establecimiento rústico se alza cerca del pequeño pueblo de Tence, apenas a unos pasos de un campo de golf que invita a paseos tranquilos y momentos de contemplación. Así, durante una semana de exploración por los paisajes y pueblos de Auvernia, tuvimos la fortuna de descubrir y disfrutar de L’ours Maçon, un verdadero tesoro gastronómico de la región. El acceso a L’ours Maçon es, en sí mismo, una experiencia que prepara los sentidos para lo que está por venir. Tras recorrer caminos serpenteantes y bordeados de árboles centenarios, el restaurante aparece entre los claros, con una fachada de piedra envejecida y detalles de madera que evocan la arquitectura tradicional de Auvernia. El aire fresco y perfumado por el bosque acompaña a quienes llegan, mientras el canto de los pájaros y el susurro de las hojas crean una atmósfera apacible. Nada más cruzar el umbral, el interior seduce con su cálido ambiente: vigas de madera, muebles robustos, decoraciones artesanales y fotografías que muestran la historia de la región. La luz natural entra por ventanas amplias, bañando cada rincón con una suavidad acogedora. El personal, siempre atento y cordial, recibe con una sonrisa genuina, anticipando el despliegue de hospitalidad que define a L’ours Maçon. El menú de L’ours Maçon es una invitación a descubrir los sabores auténticos de Auvernia. Elaborado con productos locales y de temporada, cada plato refleja el respeto por la tierra y las tradiciones culinarias. La carta cambia según el día y los ingredientes disponibles, pero siempre ofrece clásicos que han conquistado a generaciones. Entre los entrantes, destacan la terrina de campagne, con su mezcla de carne de cerdo y especias, y la ensalada de lentejas verdes del Puy, aderezada con aceite de nuez y tocino crujiente. Los quesos regionales —como el Saint-Nectaire y el Bleu d’Auvergne— ocupan un lugar especial, presentados con pan fresco y mermeladas caseras que realzan sus sabores. Los platos principales varían según el ritmo de las estaciones, pero en nuestra visita tuvimos el placer de degustar el aligot, una cremosa mezcla de puré de patatas y queso Tomme, emblemático de la región. La trucha de río, cocinada al horno con hierbas silvestres, ofrecía una frescura incomparable. El cordero de Auvernia, preparado lentamente en una cocotte de hierro, se deshacía en la boca, acompañado de verduras asadas y un fondo de vino tinto. Durante nuestra semana en Auvernia, almorzar en L’ours Maçon se convirtió en un ritual esperado. Cada comida comenzaba con una cortesía de la casa: pequeños bocados de queso y pan rústico, que preparaban el paladar para la experiencia principal. Las opciones de platos típicos regionales eran abundantes, y el personal siempre dispuesto a sugerir combinaciones que sorprendieran y deleitaran. El plato estrella del almuerzo fue el pot-au-feu, guiso tradicional de carne y verduras que resume la cocina francesa en cada cucharada. Servido humeante y acompañado de condimentos caseros, el pot-au-feu reunía a las personas alrededor de las mesas, fomentando la conversación y la camaradería. También probamos la truffade, combinación de patatas cortadas en finas láminas y gratinadas con queso Cantal, servida con embutidos artesanales. La sobremesa es un momento de relax y disfrute. Los postres, como la tarta de manzana y la crème brûlée con toques de vainilla de Madagascar, cerraban el almuerzo con notas dulces y reconfortantes. El café, fuerte y aromático, invitaba a prolongar la estancia y contemplar el paisaje desde la terraza del restaurante. Uno de los grandes atractivos de L’ours Maçon es su ubicación privilegiada. El bosque que rodea el restaurante es ideal para paseos antes o después de la comida, y la cercanía del campo de golf ofrece opciones para quienes buscan combinar la gastronomía con el deporte. Muchas personas optan por caminar entre los árboles, recoger setas o simplemente respirar el aire puro de la región. El restaurante también organiza, en ocasiones, eventos temáticos: cenas musicales, degustaciones de vinos locales, y talleres de cocina regional. Estas actividades refuerzan el sentido de comunidad y el vínculo con la cultura de Auvernia, permitiendo a quienes visitan participar activamente y conocer de cerca las tradiciones. Más allá de la calidad de la comida, lo que distingue a L’ours Maçon es el trato humano. La atención es personalizada, y el personal se esmera en explicar la procedencia de los ingredientes y la historia de los platos. El ambiente es relajado, ideal para familias, grupos de amistades o parejas que buscan una experiencia auténtica y memorable. Siempre hay tiempo para una charla con quienes trabajan en el restaurante, que comparten anécdotas y recomendaciones sobre lugares para visitar en Auvernia. Nuestra visita al restaurante se entrelazaba con recorridos por pueblos cercanos, castillos medievales y paisajes naturales. L’ours Maçon se convirtió en nuestro punto de referencia, desde donde explorábamos otras maravillas de la región: el pueblo de Le Chambon-sur-Lignon, conocido por su historia de solidaridad; la fortaleza de Polignac, que corona una colina volcánica; y el lago de Devesset, perfecto para actividades acuáticas y picnics. Al final de la semana, lo que quedó fue mucho más que el recuerdo de los platos y sabores: fue la sensación de haber formado parte de la vida cotidiana de Auvernia, de haber compartido historias bajo el techo de un restaurante donde la gastronomía, el entorno y la hospitalidad se funden en una experiencia inolvidable. Recomendar L’ours Maçon es invitar a conocer una región a través de su cocina, sus paisajes y las personas que la habitan. Es un llamado a descubrir la generosidad de Auvernia, a dejarse sorprender por la autenticidad y la calidez de un restaurante que celebra la tradición y la innovación en cada plato. https://oursmacon.wixsite.com/oursmacon Creo que nunca lograré poder visitar todos los bellos rincones de la espléndida Francia. Un gran abrazo desde estas lejanas tierras allende los mares, Félix José Hernández.
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